Vivenciar la meditación
Para alcanzar profunda sabiduría, alegría y paz
Rona Schweitz
ISBN: 978-9945-471-93-9
N. págs. 127
Formato: 215 x 138 mm
Piensas que la meditación es algo nebuloso y difícil; algo envuelto en teorías complejas e incomprensibles?
La Organización Espiritual Mundial Brahma Kumaris ofrece una manera clara, sencilla y natural para meditar.
En este libro encontrarás explicaciones sencillas, pasos fáciles de seguir e ilustraciones divertidas, para alcanzar niveles satisfactorios de meditación. El libro viene con un CD que te ayudará a entrar rápidamente en un sereno estado mental.
Dedica algún tiempo diario a la meditación y disfrutarás del encanto de vivencias profundas; llenas de sabiduría, alegría y paz.
La Organización Espiritual Mundial Brahma Kumaris es una organización educativa internacional, sin fines de lucro, que procura un cambio positivo en todas las áreas de la sociedad. Con una red de Centros de Meditación alrededor del mundo, ofrece cursos gratis de meditación y una variedad de programas educativos, para el desarrollo de valores humanos y espirituales.
Extracto: Capítulo 5 “Meditación: Un enfoque diferente de la vida”
La ilusión de propiedad
Una pregunta útil para hacerse es: ¿podemos realmente poseer algo en este mundo en donde todo es transitorio? Si el 'verdadero yo' dejase el cuerpo (muerte del cuerpo), no podemos llevarnos nada con nosotros. Entonces ¿podemos ser realmente dueños de algo en este mundo? ¿Son las palabras 'mi' y 'mío' aplicables a cualquier cosa temporal? En realidad, como seres eternos, no físicos, no poseemos nada en el mundo físico. Entramos al mundo físico sin nada y partiremos sin llevarnos nada. Al morir, todo, incluyendo el cuerpo físico, es dejado atrás.
Cuando reflexionemos sobre esto, con valentía y sinceridad, tendremos que admitir que nuestra relación con este mundo es la de un visitante, un viajero, un huésped. Incluso si permanecemos 100 años con el cuerpo, aun así es temporal. Realmente, no somos dueños ni siquiera del cuerpo. Esto también significa que tampoco podemos ser dueños de nada más. Y sobretodo no podemos ser dueños de nadie, nunca. Hemos tomado el cuerpo en préstamo. Somos observadores en el mundo físico y a lo sumo, depositarios. Este tipo de conciencia nos dará una actitud más realista hacia el mundo en general y hacia el cuerpo y las relaciones en particular.
La ilusión de propiedad lleva a expectativas, dependencia, ansiedad, miedo, arrogancia, envidia, rabia y todo un espectro de sentimientos desagradables y complicados. Cuando entendemos un panorama amplio, todo esto puede ser evitado manteniendo una perspectiva elevada del ser como un huésped en este mundo. Esto nos dará una actitud más sana hacia el mundo que nos rodea. También, nos ayudará a tener el posicionamiento mental sano, de ser un depositario en nuestras acciones y con otros.
El huésped
El 'verdadero yo' ha venido de la dimensión no física, un mundo de conciencia pura, el Hogar de las almas. El alma entra al mundo físico, toma un cuerpo en préstamo e interpreta una parte en la gran historia de los humanos. Y en algún momento en el tiempo el 'verdadero yo', el alma, deja el cuerpo. Como visitante, el alma puede usar y apreciar todas las cosas físicas, puede respetar y compartir, pero... nunca puede ser dueño de nada o nadie.
El alma es un viajero a través del tiempo y el espacio. Al final del viaje, el alma deja la dimensión física y regresa a la dimensión no-física, al Hogar de las almas.